¡Buenas perrunos!

¿Tu perro tiene miedo a los petardos? ¡Pues no está solo! Es muy común en los perros ser sensibles a ruidos fuertes. Desafortunadamente, se acerca San Juan y para la mayoría de nuestros perros son unos días terroríficos. En este post te daré unas pautas para que puedas ayudar a tu peludín a pasar el mal trago.
Podrás ver que experimentan síntomas como: temblar, jadear, salivar, no comer, inquietud, pupilas dilatadas, sudoración de las almohadillas, micción o defecación descontrolada, taquicardia… y comportamientos como: huir o esconderse, buscar contacto, ladrar, destrucción de algunos objetos o rascar la pared, posturas de miedo (cola entre las patas, orejas bajas, cabeza gacha…)
CONSEJOS PARA PASAR A SALVO EL SAN JUAN
1-Intentar evitar la situación. Paseos en horarios que eviten las horas problemáticas. Si tienes opción de irte a una casa en el campo lejos de petardos y la fiesta, no lo dudes, llévate el perro.
2-Es preferible que el perro haya hecho ejercicio temprano, pero si ya hay petardos por la mañana y no quiere salir, no pasa nada. Lo ideal sería que le hagas ejercicios de olfato en casa a diario, esconderle premios o su juguete, sobretodo estos días, para que esté algo más relajado.
3-Estos días pueden salir corriendo en el paseo, así que importantísimo que tengan chip y placa identificativa. Los paseos cortitos y ATADOS.
4-Por supuestísimo: el perro dentro de casa. Con tu compañía mejor. Cerrar las ventanas y persianas o porticones si tienes. Poner el ventilador u otros ruidos blancos para amortiguar el sonido de los petardos.
5-Proporciónale un buen sitio en casa donde se sienta seguro. Un área pequeña, preferiblemente sin ventanas, puerta abierta, con su cama, juguetes, kong, agua… Apaga la luz, sí, los perros se sienten más seguros a oscuras. Enchufa 14 días antes el Adaptil en esta zona, le ayudará a reducir la ansiedad de manera natural.
6-En su zona le puedes poner música relajante para perros, no hace falta que sea alto. Está demostrado clínicamente que reduce la ansiedad en los canes. http://throughadogsear.com/samples/
7-El triptófano ayuda a calmar los perros. Puedes darle suplementos que lo lleven y si es un perro con miedos en general hablar con tu veterinario para considerar un pienso o una dieta con triptófano y que te recomiende algún ansiolítico. Si es natural mejor. Nada de sedantes, ojito porque dejan al perro aturdido pero sigue despierto oyendo los petardos sin poder tener control de la situación, lo que podría empeorar su miedo a los petardos.
El día de la verbena le puedes dar un plato rico en carbohidratos al atardecer: patatas o arroz bien cocido, le ayudará a estar más calmado durante la noche. Consulta con tu veterinario si tu perro tiene problemas digestivos.
8-Técnicas como el Ttouch para trabajar la relajación basándose en la conciencia corporal. Otra muy buena opción son las camisetas Thundershirt que ofrecen una presión constante en el cuerpo, aliviando los síntomas de ansiedad. La mayoría de los perros responden en el primer uso, mientras que otros necesitan dos o tres usos antes de mostrar mejoras.
9-Olores como la lavanda y la bergamota también ayudan a relajar el ambiente. Puedes poner aceites esenciales normales, aunque los hay especialmente preparados para perros: http://earthheartinc.com/Canine_Calm.htm
10-Remedios naturales como Flores de Bach también pueden ayudar a trabajar la ansiedad a nivel energético. Five Flower® o Rescue Remedy® suelen ser los más recomendados.
Estos consejos son para sobrellevar la situación con urgencia, pero para tratar el problema debéis contactar con un educador canino.
Puedes trabajar el miedo a petardos en casa. ¡Aprende cómo en este otro post! ¡Aún queda tiempo antes de la verbena!
¡Ánimo! Todos los perros se merecen vivir sin miedo 🙂
Belen
Referencias
Curtis, T. Storm and Noise Phobias. Presented at the North American Veterinary Convention, January 2010, Orlando, Florida.
Horwitz, DF. Prognosis of behavior problems. Presented at the Atlantic Coast Veterinary Conference, October, 2001. Atlantic City, New Jersey.
Canine Neuropsychology for Dog Behaviour Counselors and Trainers by James O’Heare.